Mili y dos de sus amigas en la playa.
En el quincho, comiendo, comiendo y comiendo.
Parece que no se nos ve muy despiertas (y eran las 11 de la noche...)
acá nos esforzamos un poquito.
En el quincho, comiendo, comiendo y comiendo.
Parece que no se nos ve muy despiertas (y eran las 11 de la noche...)
acá nos esforzamos un poquito.
Mi cuñada, mi hermano, y mis sobrinos me invitaron a pasar unos días con ellos a San Bernardo.
La verdad, no esperaba veranear en enero. Asi que fue un verdadero regalo de reyes.
Gracias a la abuela Fani, que se quedó a cuidar a mi mamá, pude viajar el 2 de enero con el amigo "charlatan" de Nico, un tal Fernando.
como todo fue muy intenso, para aprovechar la playa, las salidas, las caminatas, las comidas, y tratar de disfrutar al máximo, me ovidé de llevar la cámara para sacar fotos. Asi que aquí van unas poquitas que reflejan como "la sufríamos".
No hay comentarios:
Publicar un comentario